Soñaba... Era un cuarto muy oscuro, aunque podía vislumbrar una sombra más tenue.
Trato de acercarse; no avanzó. Intento, caminó, corrió y gritó, todo seguía igual, el mundo rotaba y él no avanzaba.
Trato de acercarse; no avanzó. Intento, caminó, corrió y gritó, todo seguía igual, el mundo rotaba y él no avanzaba.
En un esfuerzo descomunal su cabeza pudo pasar la franja imaginaria que no podía atravesar. La sombra que veía era el marco de una ventana cerrada.
Él quería abrirla, y al intentarlo se encontró con una pared llena de ladrillos rojos.
No había salida mientras siguiera durmiendo.
