domingo, 15 de mayo de 2011

Conciencia





Tal vez sea porque estamos hechos de agua que las cosas importantes se miden en sangre, en humedades, en lágrimas.

Octavio Paz dice que la infancia destrozada y el pasado roto, hieren el presente.



NO MÁS SANGRE

Gerundio

"El olvido está tan lleno de memoria 
que a veces no caben las remembranzas 
y hay que tirar rencores por la borda"
Mario Benedetti 
Y estuve ahí.... Mal herida y a tus pies.
Dando una vida entera para poderte besar.
Cumpliendo día y noche la promesa de amarte siempre.
Recordándole al olvido lo que era el amor verdadero.
Rogándole al tiempo que no me matara en el intento.
Lamentando que siempre dijeras que NO:

Y aquí estoy... Tres semanas después de tu partida.
Sin ganas de olvidar y sin tiempo de recordar.
Fingiendo que todo terminó, y nunca comenzó.
Escapando de la verdad de un final
Riendo por que el tiempo no sonríe y la Luna sí.

Y estuve ahí... En espera de alguna utopía.
Llorándole a las noches duras.
Viajando a tierras de ningún nombre y ningún lugar.
Auto-destruyendo el mañana que no llegaba.
Pidiéndote por favor me salvaras.

Y aquí estoy... En pos de las remembranzas que me llevan a ti.
Inventando lluvias sobre mi cabeza en un día soleado.
Encontrando la fé en 17 segundos.
Deseando y esperando.
Escribiendo la última línea que hay para ti... En gerundio.

sábado, 7 de mayo de 2011

Hace ya dos semanas...

Tanto tiempo hablando de cosas triviales
Cosas como el compás en una melodía,
el ruido del transito, el sonido de las interferencias, incluso el silencio a las 2:54 a.m.
Fueron incontables las llamadas a través del teléfono.
Con una voz muy baja, para no incomodar a los que duermen.
Haciendo un eco infinito en cada anécdota.
Como dos ciegos bailando y sonriendo, 
un día así me sentí, al verte esperando en el andén.
Café, cigarros y tú... Sábado, el día perfecto.
Tú dijiste "El amor se va a estrellar, vamos a volar".
Y te dí 120 mililitros de amor, suficiente como para no quererte.
Todo lo que buscaba estaba en tu mirada.
Y de repente se perdió entre la multitud.
Nunca supiste de mis manos frías;
nunca escuchaste cuando dije sí.
Me atormenta el beso que nunca debiste darme.