domingo, 21 de junio de 2020

Other Worlds - Too Sekai (sub español)

-Oye, el mundo es bonito, no lo crees?
Solo hay una cosa que no puedo aceptar... Que algún día encontrarás tu otra mitad verdadera.
Por favor, quédate a mi lado por siempre.

domingo, 23 de febrero de 2020

Confesión.

Quien me conoce, sabrá que la geografía ha sido por siempre mi piedra de tropiezo pues nunca sé muchas cosas básicas que debí haber aprendido.

Como por ejemplo, que Australia y Japón son islas. las Galápagos, las Malvinas y Hawai son archipiélagos y que para llegar de Inglaterra al resto del continente europeo, es necesario atravesar el canal de la Mancha.

El hecho es que, a pesar de mi notable ignorancia geográfica, recuerdo que quizás desde los 15 años decidí que quería conocer París; cuya hazaña logré llevar a cabo 13 años después.

Recuerdo que el idioma francés, siempre me pareció el más romántico y perfecto, además del español, por ser obviamente mi lengua materna. Asimismo, cada película francesa que veía tenía tintes de romance tan perfectos, que solo en Francia, según yo, podían suceder.

Las melodías francesas no eran la excepción, cada una de las canciones que escuché las memoricé sin saber si quiera que decían, porque con el tiempo aprendería el idioma y sería más fácil tararear las mismas. (Qué gran mentira)

El punto es, que cuando por fin tuve certeza que mi viaje se realizaría, se tornó aún más romántico que en mi plan original, pues iría acompañada de el "amor de mis días". Y todo el plan fue sumamente perfecto, iniciamos una cuenta regresiva, nos anticipamos a las compras, a los imprevistos, a los permisos e incluso a los disgustos.

Y entre tanto romance y perfección, yo decidí que ahí le diría que lo amaba. Planeé cada lugar, cada letra, cada hora y cada acción del momento. Preví cada daño que pudiera ocasionar su reacción, por si él no lo sentía o me cambiaba el tema; no importaba. Yo tenía decidido amarlo a gritos, amarlo en el ruido, amarlo a pesar de la gente.

Yo quería decirle:
Que estar con él era un abrazo caliente en medio de una nevada o después de haber llorado.
Que estar con él significaba haber sido y haber sido con él era haber estado en un estado constante de emoción. Como subir a un juego mecánico y sentir la adrenalina en todo el estomago.
Que estar con él era gratificante, por compartir el mismo cielo, el mismo espacio, la misma cama y las mismas risas.
Que estar con él y solo apoyar mi cabeza en su hombro o en su pecho, era lo más cerca que yo jamás me podía sentir de un lugar llamado CASA.

También era importante precisar:

Que a él lo elegiría mil veces más acompañarme a donde mis deseos estén.
Que con él pasaría el amor, el invierno, la lluvia y el último segundo de vida que me quede.
Que él me curó de tanta soledad, que él me salvó de la tristeza.
Que sus ojos, sus hermosos ojos son magia
Que él me regala pedacitos de felicidad y me contagia de risas y buenos momentos.
Que él tiene un lugar en mi eternidad.

Que estoy muy segura que yo a él lo he empezado a amar.

No obstante todo fue silencio. Francia pasó sin romance.
No hice el amor en Francia, no sonaron acordeones ni pianos.
No pude esgrimir el elogio a la verdad planeado y todo se quedó en un libro sin terminar.

Sin embargo, he de pronunciar que a él quiero amarlo, que lo amo por primera vez.